“Entre duelos y anhelos, tomé la decisión”
58778
post-template-default,single,single-post,postid-58778,single-format-standard,theme-bridge,bridge-core-3.1.7,woocommerce-no-js,qodef-qi--no-touch,qi-addons-for-elementor-1.7.1,qode-page-transition-enabled,ajax_fade,page_not_loaded,,qode-title-hidden,columns-4,qode-child-theme-ver-1.0.0,qode-theme-ver-30.4.2,qode-theme-bridge,qode_header_in_grid,qode-wpml-enabled,wpb-js-composer js-comp-ver-7.6,vc_responsive,elementor-default,elementor-kit-41156

“Entre duelos y anhelos, tomé la decisión”

Doris Falcón

La crisis en Venezuela se ha profundizado durante los años 2021, 2022 y lo que va de 2023, con lo cual se afirma que aún se mantienen las condiciones económicas, sociales y políticas que expulsaron a más de 7 millones de personas según informe de Naciones Unidas1 en lo que ha sido catalogada una de las migraciones más importantes de los últimos tiempos en el mundo. Colombia es el país que ha experimentado el impacto mayor y ahora cuenta cerca de 3 millones de migrantes según un corte de Migración Colombia para octubre de 2022.2

Entre algunas de las razones para tomar la decisión de migrar, se cuenta el deterioro económico, la carencia de servicios públicos y la falta de oportunidades laborales. Según la encuesta PsicoData Venezuela, elaborada por la Escuela de Psicología de la Universidad Católica Andrés Bello,3 el principal estresor psicoemocional para el venezolano es el deterioro socioeconómico, el 75% de los encuestados indicó que en los últimos 2 años ha experimentado la falta de familiares o amigos cercanos por migración, el 34% dice que le ha costado retomar su cotidianidad después de experimentar esta falta, siendo más frecuente en mayores de 65 años (40.1%) y en las mujeres (32%).

La migración no solo tiene rostro de desgracia, también tiene rostro de oportunidad. Si se lograra mapear, por un lado, las características de los migrantes que viven en una determinada región del mundo, tales como: edades, sexo, grado de estudios, habilidades entre otros y, por otra parte, las necesidades que tiene cada país receptor, faltarían la buena voluntad del Estado para hacer que coincida lo que se ofrece con lo que se demanda.

En este sentido, los medios de comunicación tienen el desafío de tender puentes para la promoción del derecho de los migrantes en dos sentidos: (1) acceso a información clara, precisa y útil; (2) participación activa de los migrantes en los medios como fuentes de información y denuncia de irregularidades. Valdría la pena el cuestionamiento, ¿pueden los medios de comunicación convertirse en puentes para ayudar a los migrantes a ejercer sus derechos?, para ilustrar una posible respuesta a continuación tres historias que, por cuidado y protección de las personas, se toman nombres ficticios.

Y tomé la decisión de irme en avión

Antonio Mavares, venezolano de 52 años, ingeniero mecánico, jubilado de la empresa hidrológica del estado venezolano, expresa con una sonrisa, entre consuelo y duelo que “nunca estuvo en mí la idea salir del país, por la situación económica que vivía en 2015, me vi en la necesidad de tomar la decisión de migrar desde Barquisimeto- Venezuela a Bogotá- Colombia. Dejé a mi familia, hijas y esposa”.

Cuando decidió migrar, Antonio obtuvo un 80% de información relevante a través de los medios de comunicación y al respecto indica “debo resaltar que parte de la información la encontré en cuentas de Instagram, Facebook y Twitter, además de la radio y televisión, la cual me fue útil e importante para tomar la decisión; allí encontré información clara en cuanto a los procesos legales para permisos de trabajo, beneficios laborales y de salud. Fue dura la travesía de migrar a Colombia, aunque somos muy parecidos en nuestra cultura, se destaca una diferencia importante en el trato laboral. Luego busqué información en las redes sociales sobre las posibilidades legales de trabajar en Estados Unidos y el beneficio de un estatus legal a los migrantes venezolanos. Afortunadamente entré legalmente a Estados Unidos y me beneficié del estatus migratorio que ofrecían. Lo más duro de todo mi recorrido migratorio fue el duelo de dejar a la familia”.

Antonio, forma parte de los venezolanos que dejan atrás, no solo la familia, sino que llevan consigo una mochila cargada de ilusiones y esperanzas por una vida digna.

Y tomé la decisión de pasar el rio

Paola Barboza, joven venezolana de 25 años, ingeniero industrial, graduada con honores universitarios cuenta, “cuando decidí migrar desde Maracaibo, Venezuela a Estados Unidos, la primera tarea fue buscar información, lamentablemente no la encontré en redes sociales, ni radio, ni televisión, no eran fuentes confiables para mí; necesitaba el paso a paso, las formas, los caminos; pues se dice mucho y poco al mismo tiempo. La fuente de información primordial para tomar la decisión fue “de boca en boca”, tenía un amigo, que tenía una amiga que se fue, me pasó los contactos y avancé como referida, ese fue el medio de comunicación”.

Los medios de comunicación son también responsables de crear muros con la divulgación de noticias falsas y silencios intencionados en temas con la migración, pues en muchos casos son considerados como temas poco relevantes en sus líneas editoriales y políticas informativas, con lo cual hace que personas como Paola se sientan poco o nada representada en los medios.

Paola dijo tener un viaje afortunado desde Venezuela hasta México, lugar donde pasó la frontera cruzando el Río Grande, “gracias a varias personas generosas que me informaron del proceso, a través de grupos de mensajería fue posible que el miedo y la incertidumbre se minimizaran; en las redes sociales, televisión y radio hay información poco confiable”.

Y tomé la decisión de atravesar el Darién

Cristóbal Hernández, venezolano de 45 años, trabajó 28 años en la industria eléctrica del Estado, siendo representante del sindicato de trabajadores de una de las instituciones más pujantes y estables del país en los años 90 del siglo pasado. Cristóbal, cuenta “tomé la decisión de migrar a Estados Unidos, cuando no vi salidas económicas y condiciones de vida digna, para mi esposa y tres hijos de 10, 8 y 2 años; comencé mi travesía por tierra desde el estado Falcón- Venezuela, atravesando Colombia, Panamá, Costa Rica y México. Lo más duro fue atravesar el tapón del Darién en Panamá. Fuimos un grupo de cuatro personas del pueblo donde vivía y conseguimos la información de todo el viaje a través del amigo de un amigo; nos dio confianza viajar en grupo”.

Cristóbal, confiaba en la información que el grupo de amigos manejaba a través de conocidos, afirma “en la red social había noticias que en algunos momentos alentaba y animaba, pero en otros sencillamente daba miedo”. Al llegar a la selva del Darién- Panamá, Cristóbal nos cuenta que la única información que tenía era la de los “guías”, hombres que lideraban grupos de entre 15 y 20 personas para atravesar la peligrosa selva, “allí la gente pierde el sentido humano, la generosidad y la posibilidad de ayudar al otro. Vas caminando por la selva y te encuentras a una persona desmayada de hambre, enfermas por fracturas de tobillos, mujeres embarazadas, niños llorando… no podrás solucionar todo, pero pregunta si tiene hambre, pregunta si tiene dolor, pregunta si puedes dejar algo… el ser humano pierde el valor de ayudar a otro con tal de llegar…”

Entre el 2022 y el 2023, según un informe del gobierno de Panamá, unos 250 mil venezolanos han atravesado la selva del Darién y se estima que 400 mil pasarían al cierre del 2023.4

Una gota de agua en un océano

En América Latina y el Caribe se vienen fortaleciendo experiencias de Comunicación y Migración que son como una gota de agua en un océano. Estas buenas prácticas se vienen promocionando a través de espacios virtuales, en la que se intentan articular redes a favor de los derechos de comunicación y migración. El reciente mes de julio, se realizó un encuentro virtual organizado por WACC-AL (Asociación Mundial para la Comunicación Cristiana – América Latina), y se destacan dos experiencias.5

Monitor Migración y Radio Migrante

Esta experiencia intenta recoger las voces de los migrantes en todo el mundo a través de una aproximación desde las herramientas periodísticas y sus narrativas, así lo señala Andrés Cañizalez, investigador y periodista venezolano, quien en los últimos dos años ha estado al frente de este proyecto de comunicación y migración, desde la investigación y comunicación, poniendo en línea estas dos iniciativas: Monitor Migración (@migramonitor) y Radio Migrante (@radio_migrante).

Explica el investigador que “se trata de hablar de la migración, no solo desde la cifra o desde el dolor que implica la migración forzada, sino, además, contar historias y vivencias de resiliencia y adaptación a través de entrevistas cortas sobre el aprendizaje migratorio, enfocados en mostrar su vida, la realidad a la que se enfrentan, entre ellas: costumbres, alimentación, música y habla, en países muy particulares como Noruega, China, África e Islandia”.

Las casi 120 entrevistas son publicadas en redes sociales y en señal radio a nivel nacional a través de la red de Radio Fe y Alegría Venezuela. Es así como se reivindica la labor del periodismo y la comunicación que no es solo el dato y la cifra, sino que detrás hay historias y vivencias contadas de primera mano por sus protagonistas, las cuales son escuchadas.

Caminantes, vidas que se mueven

Esta iniciativa comunicacional es producida desde el año 2016 por el equipo de la Red de Migración de ALER y sus afiliadas en América Latina,6 Inmer Chevez es periodista de Radio Progreso en Honduras, con experiencia en la cobertura de 7 caravanas de migrantes que salieron de Honduras hacia Estados Unidos y forma parte de esta red.

Desde el 2018, en Honduras se comenzaron a organizar las caravanas de migrantes, con un éxodo masivo de personas que huyen de la pobreza, en las mismas se juntaban un promedio de entre 8 mil y hasta 15 mil personas que salían caminando en la noche y podían durar entre 20 y 30 días para llegar a Estados Unidos.

Según datos recientes del Instituto Migración de Honduras, en el año 2022 transitaron 13 mil 500 personas, mientras que entre enero y marzo del 2023 transitaron 55 mil personas migrantes.7 De igual modo, según una encuesta realizada por la Organización Internacional para las Migraciones,8 a los migrantes que pasan por Honduras, se tiene que de cada 10 encuestados, 5 son venezolanos, 3 ecuatorianos y 2 de Cuba.

Cuenta Chevez, que “desde Radio Progreso se acompaña a la población migrante en esa ruta, llevando sus voces, publicando sus denuncias y abordando a las autoridades cuando hay violación de Derechos Humanos a la población migrante. El enfoque del tema migratorio por parte de los medios de comunicación debe ser ético y empático, las palabras sí importan, luego es el respeto a la dignidad de quienes migran, porque van en momentos tristes y precarios de su vida”.

A modo de cierre

El principal objetivo de los testimonios fue identificar el rol de los medios de comunicación y su utilidad en la decisión de migrar, con lo cual se observa que algunos logran obtener información confiable, útil y clara a través de los medios digitales, radio y televisión y otros obtuvieron información a través de referencia. Todos han tenido que sortear la valoración de manejar dentro del duelo de migrar el anhelo de encontrar una vida digna.

Otro dato importante a resaltar es la “pobreza de comunicación e información” definida como un conjunto de situaciones en las cuales las personas carecen de acceso a plataformas de comunicación, que tienen un acceso restringido a información y conocimiento relevante y fehaciente, están excluidos de la participación en procesos de toma de decisiones.9 Esta pobreza comunicacional se caracteriza por la exclusión de las personas de participar activamente con su voz en los medios de comunicación.

Y finalmente, subrayar que los medios de comunicación, son consecuencia de los intereses de sus dueños y gestores con lo cual también, estos medios responden a intereses particulares. Siendo que muchas veces pudieran ser funcional a una visión favorable al hecho migratorio y servir de puentes o a una visión desfavorable sirviendo de muros de indiferencia.

“Es necesario comunicar el bien, para construir intercambios, para escuchar a los demás, para dar testimonio” J. Mujica.

Referencias

1. https://www.acnur.org/emergencias/situacion-de-venezuela

2. https://www.cancilleria.gov.co/newsroom/news/gobierno-nacional-grupo-interagencial-flujos-migratorios-mixtos-lanzan-capitulo.

3. PsicoData Venezuela https://psicologia.ucab.edu.ve/psicodata/

4. https://www.radiofeyalegrianoticias.com/panama-400-000-migrantes-pasarian-el-darien-al-cierre-de-2023/

5. https://www.facebook.com/100068847565441/videos/292699756638720/

6. https://aler.org/category/red-de-migracion/caminantes_vidas_que_se_mueven/

7. https://nortedecentroamerica.iom.int/sites/g/files/tmzbdl1276/files/documents/2023-06/descargar-documento.pdf

8. https://www.swissinfo.ch/spa/honduras-inmigraci%C3%B3n_m%C3%A1s-de-200.000-migrantes-transitar%C3%A1n-por-honduras-en-2023–seg%C3%BAn-prev%C3%A9-la-oim/48603768

9. Lee P. y Vargas L. (2021) p. 53. La comunicación, un derecho imprescindible para el desarrollo sostenible.

Doris Falcón, Venezolana, con 23 años de experiencia en gestión con organizaciones sociales. Actualmente trabaja en Fe y Alegría Venezuela- Red nacional de radio, como Coordinadora internacional de gestión de fondos. Tiene estudios de Mercadeo social, Comunicación, Educación para adultos y Tecnologías para el desarrollo.

No Comments

Sorry, the comment form is closed at this time.